Cuesta encontrar la definición precisa de «cine choronga», mucho más su etimología. A lo sumo, sabemos que la expresión es una especie de marca registrada de El Amante. Pero -vaya injusticia- ni siquiera podemos identificar al padre de la criatura: ¿habrá sido el ocurrente Quintín, su sucesor Gustavo Noriega, Javier Porta Fouz -tan encariñado con el término- o algún otro (ex) integrante del staff de la alicaída revista especializada?
La hipótesis más obvia indicaría que el neologismo sirve como categoría o, peor aún, como gran bolsa (de basura) donde van a parar todas las películas dignas del desprecio y la descalificación de los cinéfilos expertos. La noción se convierte entonces en una etiqueta útil y expeditiva para quienes confunden el ejercicio de la crítica con la elaboración de un dictamen judicial (sentencia incluida).
Aún descartando las implicancias tiranuelas, el adjetivo inventado mantiene su connotación despectiva. A veces significa sensiblero, a veces cursi, a veces inverosímil, a veces antiestético, a veces masivo o burdo, a veces manipulador o deshonesto. A veces todo eso junto.
En caso de que estas acepciones sean válidas, llegó entonces el momento de asumirlo: siento debilidad por ciertas películas «chorongas» (que conste; el término me parece odioso). De ahí la confección de una lista de diez favoritas y -quizás así tenga menos vergüenza- la invitación a dejar un comment a quienes quieran compartir la suya.
Aquí van; éstas son. El orden de aparición obedece a los caprichos de mi memoria, y no a una intención de ranking. Por favor que Dios, Quintín y El Amante (la Santísima Trinidad, bah) me perdonen.
– La edad de la inocencia
– El baile de las feas
– Frankie & Johnny
– Mi gran casamiento griego
– Cuatro bodas y un funeral
– Matrimonio por conveniencia
– El gusto de los otros
– La verdad sobre perros y gatos
– Gente como uno
– Kramer vs. Kramer
Dos de yapa… 😳
– La amante del teniente francés
– La fuerza del cariño